Turismo Residencial en Zonas Costeras: análisis de dos instrumentos de ordenamiento territorial

La Evaluación de Impacto Ambiental y la Ordenanza Costera de Rocha resultan insuficientes para la preservación de la zona costera frente al turismo residencial.

El desarrollo del turismo residencial es una de la actividades económicas de mayor prevalencia en la zona costera de los Departamentos de Maldonado y Rocha. La impermeabilización del suelo, la disminución de la biodiversidad y la homogeneización del paisaje son solo algunos de los impactos generados por la intensificación de prácticas vinculadas a este modelo de turismo.

Sobre este territorio actúan dos Instrumentos de Ordenamiento Territorial: la Evaluación de Impacto Ambiental (EIA) y la Ordenanza Costera del Departamento de Rocha. El trabajo estudia los contenidos de estas dos herramientas de gestión contrastando sus objetivos con las transformaciones dadas a nivel territorial y sus impactos socio-ambientales. Se revela un comportamiento ineficiente de estos dos instrumentos y se ponen en evidencia aciertos y fallas en la concepción e implementación de los mismos. 

Como resultado, se detectó información errónea, contradictoria o minimizada en las EIA analizadas. Esto deriva en una intensa transformación de los espacios abiertos, la apropiación privada de la playa pública, un aumento en la  fijación de dunas y en la sustitución de ecosistemas. Se observa poca especificidad en los requerimientos de los informes, y se reconoce una falta de visión integrada del sistema socio ecológico a modificar.

En cuanto a la Ordenanza Costera de Rocha, contiene medidas que resultan escasas para evitar las pantallas visuales hacia la playa, fortalece la sobrecarga de las mismas y fomenta su uso exclusivo por parte de los propietarios con el mayor poder adquisitivo. Se reconoce por lo tanto la participación de este instrumento en los procesos de fragmentación socio espacial que existen en las áreas de mayor conservación nacional. 

Como recomendaciones se plantea trabajar en la claridad de los objetivos de las políticas aprobadas; rever los contenidos solicitados para la construcción de informes; analizar las capacidades técnicas instaladas para su cumplimiento;  trabajar en un monitoreo real post proyecto y aumentar la transparencia en los procesos de autorización.

Autora de ficha Priscila Rodríguez